«Que chiflete!»
Como se habrán dado cuenta por el título del post, (que en caso de no leerlo te invito con mucha ternura a hacerlo: Hacelo :) ) voy a hablar básicamente sobre las precipitaciones, sí, las precipitaciones, palabra jodida si las habrá.

Si bien el concepto de esta palabra incluye desde la llovizna mas ligera hasta la tormenta del golfo, voy a tocar precisamente esas que te cagan la vida, las que hacen que un 15 de Marzo a las 2 de la tarde en tu casa se convierta en un 30 de Julio a las 4 AM en el desierto mas cercano a tu hogar.

«¿De qué te reís Gil?»
Por si no ubicas exactamente de lo que hablo y residís en buenos aires o alrededores, podés recordar ese temporal de hace unas semanas que hizo mierda todo y terminó con "Riquelme no está felí". En
caso de residir en Córdoba pensá exactamente lo mismo pero cambiá las inundaciones por macetas de tierra en tu cuerpo. Y sí residís en otra parte de la Argentina no sabría que decirte, desconozco tu situación pero copate con la historia igual, dale, que no se corte.

Muchos en este momento estarán pensando: "Dale, si dormir con lluvia es lo más lindo!" o "Nah, los días de lluvia son para ponerla, no entendés nada..." Queridos lectores, me parece perfecto lo que dicen e incluso lo comparto, pero una cosa es hacerlo con una hermosa y cálida lluvia que nos hace pensar que estamos en una costa caribeña y otra totalmente diferente es escuchar:

"Hijo de puta, me volaste el techo, hijo de puta"
"Uh, el granizo, mete el auto que se viene el granizo!"
"Vení Marta, trae el jabón y salí al patio conmigo" (Este ultimo es raro, pero los hay).

Una de las peores consecuencias de la lluvia son las llamadas inundaciones, las mismas son capaces de convertir un simple vecindario en una versión tercermundista de Venecia, pero sin ese temita de la peste negra.

«Vieja, trae el salamín que estamos»
El problema acá es cuando el agua decide no quedarse solo en la calle, sino que labura, hace algunas changas y expande sus territorios hacia la vereda, previa habilitación municipal sigue creciendo y hasta logra entrar en algunos hogares, esto podría ser un digno ejemplo de crecimiento, si no fuera por el hecho de que es ilegal y sobre todo ilógico, pero ocurre.

"LINEAAAAA"
Como las cosas malas no pueden venir solas (siempre traen amigos a jugar), la inundación viene acompañada de un corte del suministro eléctrico. Obviamente tener electricidad en un momento de inundación es casi tan peligroso como entrar con la camiseta de River a la bombonera y señalarse los genitales, por lo que podríamos decir que si bien es una paja estar sin luz, es lo más seguro para esas circunstancias.

Pero acá aparece lo más temido por todos, o por casi todos, o bueno por una minoría, ok, por mí  y algunos más... Los truenos, imposible no saltar cual señora en un bingo parroquial al momento de escuchar uno. Sé que es un miedo ilógico, que el trueno en sí no me va a hacer nada, pero las cucarachas tampoco hacen mucho y nadie las quiere, seamos realistas...

«Compartir este blog es amar...»
Acá en teoría debería poner el cierre, darle el toque final y por lo que veo algo de sentido al post, pero no puedo concentrarme por el ruido de la lluvia y probablemente se me corte la luz en unos minutos así que prefiero dejarlo como está y poner una foto de gatitos re tiernos. Awwww.


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